La oficina personal es algo más que un espacio privado para el desempeño de nuestras funciones laborales. En una empresa de cualquier sector y tamaño, también es el núcleo que da energía a cada faceta del negocio, algo así como la base de operaciones.
En el caso de los autónomos, la oficina es además el único centro de trabajo, de modo que tiene que estar debidamente adecentado para que nuestras tareas puedan llevarse a cabo sin impedimentos. Puede que al principio de cualquier actividad profesional, cuando todavía estamos intentando ganarnos una cartera de clientes estable, nos cueste invertir ahorros o préstamos online al instante en el perfeccionamiento de una oficina, pero con el tiempo veremos que se trata de una inversión a largo plazo que solo trae beneficios.
¿De qué manera podemos establecer un espacio de trabajo óptimo, práctico y cómodo sin que ello suponga un gasto excesivo de nuestros fondos? No podemos comprar a lo loco, eso está claro. En función de nuestra profesión, nuestra capacidad adquisitiva y nuestros objetivos de futuro, deberíamos establecer un presupuesto inicial.
La primera recomendación es hacer una lluvia de ideas con respecto a todo aquello que sabemos que necesitamos: escritorios amplios, sillas de oficina ergonómicas, un equipo informático decente y actualizado, sillones y mesas camillas para reuniones con clientes potenciales, una máquina de café y tal vez incluso un pequeño office, estanterías, impresora, escáner, etc. Es mucho, pero en realidad hemos mencionado lo mínimo necesario a la hora de disponer de una oficina medianamente decente.
Porque, aunque tomemos la decisión de trabajar con los recursos materiales justos e invertir pequeños préstamos rápidos en ellos, y decidamos que es mucho mejor recurrir a servicios externos o a espacios anexos en lo que respecta a impresión de documentos, reuniones o refrigerios, lo cierto es que eso implica otro tipo de gasto: de tiempo y de esfuerzo.
Si queremos optimizar de verdad nuestro rendimiento laboral diario, la mejor idea posible es concentrar todo lo necesario en un solo lugar. La oficina es, por lo tanto, necesaria, y debemos poner en su creación y mejora todo nuestro esfuerzo.