Todo el mundo alguna vez hemos tenido algún gasto que no contábamos con él y no tenemos dinero en ese momento para pagar esa deuda y hemos tenido que recurrir a pedirle el dinero a un familiar o amigo o a pedir préstamos rápidos para solucionar el problema en el momento.
Esto tiene sus ventajas y sus inconvenientes como todo y hay que mirar que solución es la mejor en cada momento.
Alguna ves se nos ha roto algún electrodoméstico y no sabemos que hacer, si llamar a un técnico para que mire si se puede arreglar con lo que eso conlleva o directamente comprarnos uno nuevo, si eliges la primera opción tienes que tener en cuenta que es la opción más barata a primera visto porque solo tendrías que pagar la pieza nueva y al técnico para que te la repare pero no siempre es así ya que, como todo el mundo sabemos, vivimos en la época de la obsolescencia programada y los fabricantes hacen que sus productos tengas una vida útil limitada y así tener que comprar de nuevo un producto nuevo. Eso hace que nos planteemos el comprar un nuevo producto ya que muchas veces sale más caro el recambio que el propio electrodoméstico.
En este sentido, hay que saber mirar los pros y los contras de cada uno y siempre es recomendable tener algún dinero ahorrado para cualquier circunstancia que suceda.
A continuación te voy a dar unos tips para que esos gastos inesperados no sean un dolor de cabeza.
Crea un fondo de emergencia: Tener apartados unos ahorros de emergencia es la mejor forma de estar preparado para cualquier imprevisto. Abre una nueva cuenta de ahorro y trata de ingresar periódicamente dinero, para que en caso de aprieto tengas acceso a él lo más rápido posible.
Planifica tu presupuesto mes a mes: Crea un presupuesto mensual para controlar tus gastos frente a tus ingresos, cíñete a él, trata de evitar las compras impulsivas y utilízalo para ahorrar lo máximo posible.
Identifica posibles fuentes del problema: El futuro no se puede predecir, pero hay ocasiones en las que sí que percibes que algo puede torcerse y te prepararas con tiempo. Si tu coche pasó la ITV muy justito, no es descabellado pensar que algún día podría decir adiós para siempre o si han pronosticado que se aproximan fuertes lluvias, es posible que te reaparezcan esas malditas humedades del techo.
Todos estos consejos te podrán ayudar a prevenir esos gastos inesperados.