09 Mar
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Una buena filosofía de gestión debe estar construida a partir de ciertas características para que sea creíble y representativa. A continuación se detallarán dos de ellas.

Realismo

La filosofía de gestión debe ser realista, es decir, los planteamientos que ella contenga deben ser consecuentes con la situación de la organización y sus verdaderas capacidades y potencialidades. Una filosofía de gestión realista contendrá objetivos y proyecciones realizables y al alcance de tanto la organización como para sus empleados, un aspecto que generará motivación en todos los niveles de la entidad.

Es un error común que las filosofías de gestión pequen de optimistas y coloquen objetivos muy ambiciosos y/o valores que no se correspondan con los que son practicados en el día a día. Objetivos demasiado grandes pueden causar desilusión y desmotivación en el seno de la organización, y los valores irreales pueden construir una imagen falsa de la organización que los consumidores pueden identificar como tal con una facilidad que quizás no tengan los empleados.

Ser realista implica un ejercicio de honestidad para conceptualizar la empresa de la manera más fiel posible y acorde a lo que es es al momento de elaborar la filosofía de gestión. Por ejemplo, si tu agencia de marketing digital no cuenta con un amplio personal, no deberías colocar objetivos que no correspondan con la fuerza laboral que tienes en nómina.

Perspectiva

Elaborar una filosofía de gestión requiere de perspectiva o, puesto de otro modo, la capacidad de visualizar todos los rasgos constitutivos de la empresa en su momento presente y aproximar su desarrollo en el mediano y largo plazo. Contar con perspectiva es útil para elaborar proyecciones sensatas y que sean verdaderamente realizables por la empresa.

La perspectiva es muy necesaria al elaborar la Visión, que es el apartado de la filosofía de gestión que señala cuál es el escenario al que la organización quiere llegar en el largo plazo, lo que supone la consecución de los objetivos también presentes en la filosofía de gestión. Es indispensable la Visión expuesta sea una proyección que corresponda con las acciones que la empresa ejecute y también con los objetivos establecidos para que goce de credibilidad.

La perspectiva es útil también para establecer los Valores porque ella permitirá visualizar los rasgos característicos de la labor de los empleados y de la organización. Estos rasgos no siempre son evidentes, y suelen estar implicados antes, durante y después de la labor como tal. Si, por ejemplo, la organización se orienta al posicionamiento SEO, es concebible que uno de los valores sea la creatividad.

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